El embarazo en la adolescencia
Embarazo a temprana edad
Número de nacimientos en adolescentes por cada 1000 mujeres entre 14 y 19 años en 2002. En casi todos los países
del mundo las tasas de nacimientos en adolescentes van descendiendo.
Para la prevención y correcta asistencia médica la OMS considera fundamental la promoción de la educación sexual,
la planificación familiar, el acceso a los métodos anticonceptivos y la asistencia sanitaria universal en el marco de la salud pública
y los derechos reproductivos.
Embarazo adolescente o embarazo precoz es aquel embarazo que se produce en una mujer adolescente, entre la adolescencia
inicial o pubertad –comienzo de la edad fértil– y el final de la adolescencia. La OMS establece la adolescencia entre los 10 y
los 19 años. El término también se refiere a las mujeres embarazadas que no han alcanzado la mayoría de edad jurídica, variable
según los distintos países del mundo, así como a las mujeres adolescentes embarazadas que están en situación de dependencia de la familia de origen.
La mayoría de los embarazos en adolescentes son embarazos no deseados. Aunque la OMS considera el embarazo adolescente un problema
culturalmente complejo, alienta a retrasar la maternidad y el matrimonio para evitar los altos índices de mortalidad materna y mortalidad
de recién nacidos así como otras complicaciones sanitarias –parto prematuro, bajo peso, preeclampsia, anemia–, asociadas al embarazo en jóvenes
adolescentes. En 2009 se estimaba que 16 millones de adolescentes, con edades comprendidas entre los 15 y 19 años, daban a luz cada año,
un 95 % de esos nacimientos se producen en países en desarrollo, lo que representa el 11 % de todos los nacimientos en el mundo.
La OMS considera fundamental la promoción de la educación sexual, la planificación familiar, el acceso a los métodos anticonceptivos y
la asistencia sanitaria universal en el marco de la salud pública y los derechos reproductivos para evitar los problemas asociados al
embarazo adolescente.
Las adolescentes embarazadas enfrentan muchos de los mismos problemas relacionados con el embarazo de otras mujeres. Sin embargo,
existen problemas adicionales para los menores de 15 años, ya que no se encuentran desarrollados físicamente como para mantener
un embarazo saludable o dar a luz.Para las niñas de 15 a 19 años, los riesgos se asocian más con factores socioeconómicos que
con los efectos biológicos de la edad.[10] Los riesgos de bajo peso al nacer, trabajo de parto prematuro, anemia y preeclampsia están
relacionados con la edad biológica, y se observan en los partos de adolescentes incluso después de controlar otros factores de riesgo
(como acceder a atención prenatal, etc).
En los países desarrollados, los embarazos de adolescentes se asocian con problemas sociales, incluidos niveles educativos.